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La primavera es, según dicen, la estación del amor. Pero en el caso de la viña la cosa cambia, parece que es la melancolía y la tristeza la que se apodera de esta estación, ya que es en primavera cuando se produce uno de los fenómenos más curiosos: el "lloro" de la vid.
Se trata del primer síntoma del comienzo de su ciclo vegetativo. Durante el "lloro", que suele durar unas tres semanas, los cortes de la poda que se han hecho a la viña emanan un líquido incoloro, como si estuviera llorando.
Por ejemplo, una viña joven puede expulsar hasta 5 litros de agua, gota a gota. Con el llorar de las vides, los campos nos recuerdan que el tiempo pasa y que llega el momento de empezar a producir una nueva cosecha.
En los próximos días, explicaremos cómo va evolucionado la viña después del "lloro" y los momentos más importantes que se producen en su ciclo vegetativo con el paso del tiempo, el cambio de clima, las distintas estaciones del año, etc.
